Mostrando las entradas con la etiqueta Aguadita. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Aguadita. Mostrar todas las entradas

domingo, 8 de diciembre de 2024

#El Camino a la Aguadita: Una Aventura entre Sueños y Realidades


Eran las 8:37 de la mañana, de un 8 de diciembre, cuando el sol tímido luchaba por abrirse paso entre las nubes que aún susurraban la melodía de las lluvias nocturnas. El aire, impregnado de frescura, envolvía los cerros cercanos a Silvania. Entre este paraíso natural, Kike, un hombre de espíritu inquieto y mirada soñadora, se preparaba para emprender un recorrido desconocido. La curiosidad que nació aquel viernes, mientras don Wilson lo llevaba en moto hacia la finca El Pedrero, lo había inquietado durante días. Algo en esa ruta le susurraba secretos que debía descubrir.

Con su fiel mochila al hombro y la aplicación de rutas encendida, Kike se despidió de Linda prometiéndole que, si la lluvia lo sorprendía, regresaría. Pero algo en su corazón le decía que ese día, un 8 de diciembre, sería diferente. Encomendándose a Dios, inició su camino.

El sendero estaba lleno de vida. Flores brillaban como joyas entre la vegetación húmeda, y el rugido de los ríos resonaba con una fuerza casi mística. Kike avanzaba, capturando con su celular cada momento mágico, como si quisiera eternizar la conexión entre su alma y la naturaleza.

En medio de su trayecto, un pensamiento lo asaltó: un sueño que había intentado interpretar desde las primeras horas de la madrugada. Aunque los detalles eran borrosos, había una idea clara que resonaba en su mente: "Todo tiene un porqué." Inspirado por la biografía de Steve Jobs que leyó meses atrás, Kike reflexionó sobre cómo la vida, en su aparente caos, tenía un orden perfecto.

Hace un año, ni siquiera imaginaba vivir en la casa de sus sueños en Silvania. Ahora, cada paso que daba por ese sendero desconocido simbolizaba los caminos que Dios y el universo le habían abierto. A lo largo del recorrido, se sorprendió recordando los mensajes de aliento que recibía de personas impactadas por sus escritos, tanto en redes sociales como en WhatsApp. Sus palabras resonaban, tocaban corazones y despertaban esperanzas.

La lluvia, que comenzó como una leve llovizna, lo acompañó como un susurro constante mientras se adentraba hacia lo desconocido. Al llegar a La Aguadita, el paisaje lo dejó sin aliento: colinas verdes, casas humildes llenas de calidez y una iglesia que parecía custodiar los secretos del lugar. Allí, Kike oró con gratitud, sintiendo que ese punto en su recorrido marcaba un antes y un después en su vida.

De regreso, una equivocación lo desvió del camino planeado, llevándolo a una quebrada escondida, donde aguas cristalinas danzaban bajo la luz que se filtraba entre los árboles. Grabó un video y, sonriendo, se dijo: "Si no me hubiera perdido, jamás habría descubierto este rincón mágico." Nuevamente, el mensaje del día se hizo presente: "Todo tiene un porqué."

Cuando llegó a casa, el reloj marcaba el final de una jornada inolvidable. Con 26.22 kilómetros recorridos, Kike no solo había conquistado un nuevo sendero, sino también su alma. Su corazón se llenó de gratitud por los dones que Dios le había otorgado, especialmente el de escribir con una prosa que transformaba vivencias simples en mensajes de esperanza para otros.

Esa aventura fue un recordatorio de que los sueños son como mapas que nos guían hacia destinos inesperados, y que confiar en Dios y en el universo siempre nos lleva al lugar donde debemos estar.

"Seguidores"

🌙 El Misterio de los Tres Encuentros

  Érase un miércoles 27 de agosto, cuando el alba emergía sobre una tierra humedecida por el rocío. La alameda dorada, hacia la curva de sen...